Vivimos en la era de la inmediatez, con un acceso ilimitado a datos con solo un clic. Sin embargo, esto también nos enfrenta a una sobrecarga de contenidos y desinformación, que a menudo es difícil de verificar y, en muchos casos, es falsa. Este fenómeno también ocurre con la energía solar fotovoltaica, provocando polémica en la sociedad. Por esta razón, resulta vital desmentir los mitos que se extienden por redes sociales y que no debes creerte.
¡Te contamos la verdad de los mitos más comunes en este sector!
“Las placas sólo sirven si es verano”
Si bien una instalación fotovoltaica funciona al máximo rendimiento durante las horas que la luz solar es más directa, eso no significa que necesite de altas temperaturas o un sol intenso constantemente para ser efectiva.
Por tanto, no debes creerte este mito.
Además, también es un error común pensar que sólo funcionan bien en “climas cálidos”. Si bien un país en el que la luz directa del sol es el lugar más óptimo e idóneo, no quiere decir que los lugares con un clima menos soleado no puedan hacer uso de la energía solar, ya que incluso en días nublados se puede generar energía de forma considerable.
Una prueba de ello la obtenemos visitando algunos otros países del centro y norte de Europa, donde cada vez son más los tejados de viviendas o instalaciones en los que distinguimos placas solares.
“¡Es muy caro! No merece la pena”
Si bien es cierto que instalar una placa solar requiere de una inversión inicial significativa, la gran independencia y seguridad energética que ofrece lo convierten en una apuesta segura a largo plazo.
Además, ofrecen una vida útil de hasta 30 años. Durante este período, las placas requieren un mantenimiento mínimo, lo que reduce aún más los costos operativos.
A medida que la tecnología avanza, la eficiencia de las placas solares mejora, asegurando que incluso en sus últimos años, sigan siendo una fuente viable de energía.
Esto convierte a la energía solar en una opción no solo económica a largo plazo, sino también confiable y sostenible ya que con el tiempo, los ahorros en costos energéticos y los posibles incentivos fiscales acaban compensando y suponiendo un retorno de la inversión.
“¡Son muy contaminantes!”
Es cierto que la fabricación de componentes para sistemas fotovoltaicos implica el uso de materiales como el silicio. Sin embargo, el impacto ambiental de estos materiales se reduce significativamente gracias a su gran potencial de reciclaje.
Hasta el 90% de los materiales en un panel fotovoltaico, como el vidrio, aluminio, silicio y cobre, pueden ser recuperados y reutilizados. De hecho, la infraestructura de reciclaje de paneles solares está en rápida expansión en toda la Unión Europea, mejorando continuamente la sostenibilidad de la energía solar.
Desmentir estos mitos no solo nos permite tener una visión más clara y precisa de la energía solar fotovoltaica, sino que también nos abre la puerta a aprovechar todos sus beneficios. En un mundo donde la sostenibilidad es cada vez más crucial, es fundamental contar con información verificada y basada en hechos. La energía solar representa una oportunidad real para avanzar hacia un futuro más limpio y sostenible.
Ahora que has descubierto la verdad, ¿estás listo para ser parte del cambio y aprovechar el poder del sol?